Paterson, NJ.-Como parte de los cambios que experimentará la nueva administración de la ciudad, la nuevo Alcaldesa de Paterson ha emitido una orden en la cual se les impide a todos los empleados de esta Ciudad para que tengan contactos con el ex Alcalde José -Joey- Torres. En otras palabras, los funcionarios del Ayuntamiento están impedidos de hablar con el ex incumbente.
Alcaldesa de Paterson
Al parecer, algunos de los funcionarios de la Ciudad se han estado comunicando con Torres, por lo que la Alcaldesa Jane Williams-Warren se ha puesto en la expectativa de lo que está aconteciendo con el funcionamiento de su gestión. Se dice que en la actualidad a Torres les han estado llamando por diversos problemas relacionados con la ciudad.
Entendemos que Torres siempre ha mantenido relaciones con la comunidad, tal y como ha hecho cuando los electores llaman con quejas. Según él, hace lo de siempre, levanta el teléfono e intenta solucionar la situación que le plantean como parte de su servicio a los residentes de esta Ciudad.
Se dice que la primera Orden Ejecutiva emitida por Williams-Warren es una prohibición contra los empleados de Paterson para que hablen con Torres sobre los negocios de la ciudad. “Se ordena a los empleados de la ciudad que reciben una comunicación del ex Alcalde José -Joey- Torres sobre asuntos de la ciudad que rechacen hablar con el señor Torres y denuncien el incidente al Director de su Departamento”, indica la orden firmada por Williams-Warren.
En los detalles que se incluyen en la orden, la dirección de la Alcaldesa también les indica a los empleados que no deben manejar “la comunicación de una manera indirecta a través de un tercero o representante cuyo propósito es transmitir una comunicación”, respecto a tener contacto con Torres en lo adelante sobre los asuntos de negocio de la ciudad.
Podemos interpretar que al mantenerse en contacto con los empleados, Torres les ha estado dando las orientaciones a los funcionarios para que hagan uso de sus funciones con el mejor interés de hacer el bien a los residentes en pos de la ciudad en general. Es posible que Torres haya entendido también que debe mantener sus vínculos para dar seguimiento a algunos de esos cabos sueltos que han quedado de su administración.
Aunque Torres ha externado que ninguna de sus llamadas a los trabajadores de la Ciudad han sido realizadas “de una manera autoritaria”, ha indicado que, por el contrario, se deben a que ellos fueron “más inquisitivos, en busca de información”, dijo Torres.
Según informaciones, a principios de este mes, la Ciudad recibió una Citación de la Procuraduría General de la República que buscaba Registros Públicos que pudieran implicar cualquier acción oficial de las que fueron tomadas por Torres desde el 22 de septiembre, cuando se declaró culpable, y el 25 de septiembre, cuando renunció.
Esto puede deberse a que la Procuraduría General al no intentar hacer que Torres renunciara en ese mismo día que se declaró culpable, pues se opuso a esta medida, indicando que la Ciudad necesitaba una transición. En tal sentido, el Juez en el caso permitió a Torres permanecer en el cargo por unos días más, los cuales correspondían a ese fin de semana.
En ese mismo orden, la Ciudad también ha estado recibiendo citaciones adicionales por parte del Departamento de Justicia de los Estados Unidos después de la renuncia de Torres, al parecer como parte de una investigación que, por lo visto, habrá de continuar a pesar del éxito obtenido por el Estado en haberlo condenarlo.
Por el momento, no se está claro si de manera específica Torres hizo alguna de las llamadas a los trabajadores de la Ciudad con respecto a los temas que están siendo investigados por las autoridades federales. Lo que sí se tiene programado es la sentencia de Torres en el Caso Estatal, la cual será para el próximo día 3 de noviembre.
De todas maneras, la realidad de la situación es que ni las llamadas de Torres, ni la orden emitida por la Alcaldesa, ni la continuación de las investigaciones cambiarán el curso de un hecho que ha sido consumado. De lo que sí estamos claro es que a quien le tiró todo el lodo encima a Torres está bien satisfecho del cobro por haberle faltado, ya que pagará con creces el error cometido.
